lunes, 24 de abril de 2017

Trump podría enviar más tropas a Afganistán

Doce días después de lanzar en Afganistán la “madre de todas las bombas”, el jefe del Pentágono, James Mattis, ha viajado al país en visita sorpresa, la primera de un alto representante de la administración Trump. La visita coincide con el anuncio de la dimisión del ministro de Defensa y el jefe de las fuerzas armadas afganas, a consecuencia del ataque de los talibanes que causó más de 100 muertos el pasado fin de semana en una base militar en el norte de Afganistán.

Hoy mismo, un coche bomba ha explotado a la entrada de Camp Chapman, una base de tropas y mercenarios estadounidenses en la provincia de Jost, en el este del país. Un portavoz militar se limitó a decir que había víctimas afganas, sin precisar cuántas, y ninguna norteamericana.

La visita del secretario de Defensa podría indicar que la administración Trump está dispuesta a enviar más tropas a Afganistán. Recientemente, el comandante de las fuerzas estadounidenses en Afganistán, general John Nicholson, dijo al Congreso que necesita unos cuantos miles más de soldados para apoyar al ejército afgano. Según el consejero nacional de seguridad de Trump, el general H.R. McMaster, que viajó a Kabul la semana pasada, los talibanes han redoblado sus esfuerzos y por tanto toca hacer lo mismo. Estados Unidos mantiene unos 9.800 soldados en Afganistán, más un número indeterminado de contratistas o mercenarios.

En el ataque del pasado viernes a una base en la provincia de Balj, cerca de la ciudad de Mazar i Sharif, murieron 144 soldados afganos, y los norteamericanos creen que los talibanes, que utilizaron uniformes y vehículos militares, contaron con cómplices dentro de la base y planearon la acción durante meses. El portavoz oficial de los talibanes, Zabihulah Muyahid, dijo en un mensaje que cuatro de los diez atacantes iban, en efecto, disfrazados de soldados. Los estadounidenses sospechan de la llamada red Haqqani, grupo talibán que siempre ha estado en su punto de mira. El ministro de Defensa, Abdulah Habibi, y el jefe de estado mayor, Qadam Shah Shahim, han dimitido hoy lunes, según ha confirmado el presidente afgano, Ashraf Ghani.

Hasta el momento, la acción más importante de Estados Unidos en Afganistán ha sido el lanzamiento de la poderosa bomba GBU-43 contra un reducto del Estado Islámico en la provincia de Nangarhar, en el este del país. El secretario de Defensa, James Mattis, ha rehusado hasta el momento hablar de los daños causados por este bombardeo, que el ex presidente afgano Hamid Karzai calificó de “atrocidad".


martes, 11 de abril de 2017

Donald Trump “mantiene abierta la posibilidad de futuras acciones” contra Siria


"El presidente mantiene abierta la posibilidad de futuras acciones", indicó en su rueda de prensa diaria Spicer, quien aseguró que el principio que las guiará será "proteger el interés nacional de Estados Unidos" y que Trump tiene la autoridad legal para actuar.

El jueves, Trump autorizó el lanzamiento de 59 misiles guiados desde dos destructores desplegados en el mar Mediterráneo contra una base aérea del régimen sirio de Bashar al Assad en respuesta a un ataque, dos días antes, con armas químicas contra población civil.

Spicer aseguró que las capacidades de abastecimiento de combustible, de radares y el 20% de los aviones de la base aérea siria de Shayrat (provincia de Homs) fueron destruidos y, por lo tanto, "las posibilidades de operar desde esa base han desaparecido".
El portavoz tachó de "operación de propaganda" de Siria las noticias de que la aviación de Al Assad ha vuelto a lanzar bombardeos contra poblaciones controladas por la oposición rebelde desde esa base aérea.

Del mismo modo, Spicer reiteró la postura expresada ayer por la embajadora estadounidense ante Naciones Unidas, Nikki Haley, de que no es posible una Siria "en paz y estable" con Al Assad en el poder.

En este sentido, confió en que Rusia, aliado de Damasco, juegue un papel positivo para motivar un proceso político que ponga fin a más de seis años de guerra civil.

El portavoz aseguró que Rusia mantiene intereses comunes con Estados Unidos, como acabar con los yihadistas del Estado Islámico (ISIS), y que Washington está dispuesto a trabajar con Moscú en este sentido.

El secretario de Estado, Rex Tillerson, se reunirá el miércoles con su homólogo ruso, Serguei Lavrov, para explorar la posibilidad de una relación más cercana con Moscú en temas de interés común.